La masacre, inicialmente atribuida a las disidencias de 'Iván Mordisco', evidencia la persistente violencia que azota al departamento.

El hecho ocurrió el 3 de noviembre, cuando hombres armados ingresaron al establecimiento comercial ubicado en el casco urbano y abrieron fuego indiscriminadamente contra los asistentes.

Las víctimas mortales fueron cuatro, y los heridos fueron trasladados a hospitales en la zona y en Cali debido a la gravedad de sus lesiones. Con este evento, Indepaz registró la masacre número 67 en lo que va del año 2025, de las cuales seis han ocurrido en el Cauca. La autoría del ataque generó controversia, ya que las disidencias de 'Iván Mordisco' emitieron un comunicado negando su responsabilidad y, en cambio, señalaron al 'Frente Yair Bermúdez', una facción que se separó de su estructura en 2023 y que ahora operaría con la Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano. Este episodio se enmarca en una nueva oleada terrorista en el suroccidente del país, que ha incluido otros atentados y asesinatos en la región, demostrando la complejidad y fragmentación de los grupos armados que se disputan el control territorial.