Según los informes, hombres encapuchados y armados llegaron a la vivienda donde se encontraba la pareja, los sacaron por la fuerza, los amordazaron, los maniataron y los ajusticiaron metros más adelante con heridas en la cabeza.
La principal hipótesis de las autoridades apunta a que el crimen fue una represalia contra Arcos Muñoz. Fuentes oficiales señalan que el joven, al parecer, habría sido integrante de la estructura ‘Jaime Martínez’ de las disidencias en el Cauca, de donde desertó, y estaría realizando actividades irregulares como exigir dinero a nombre del grupo. Sin embargo, su hermana, Claudia Patricia Arcos, manifestó a LA NACIÓN desconocer estos vínculos y sugirió que el móvil podría ser el robo, ya que a las víctimas les hurtaron teléfonos celulares, un computador portátil y dinero. El alcalde de Saladoblanco, Javier Bambagüe, expresó su preocupación y señaló que el crimen ocurre en un contexto de incertidumbre, pues hace unas semanas circularon panfletos intimidatorios atribuidos a disidencias en la zona. “Esperamos que en las próximas horas tengamos una información al respecto si tiene que ver la muerte de estos dos jóvenes con esos panfletos que andaban circulando”, declaró el mandatario. Las autoridades militares han indicado que no hay presencia confirmada de disidencias en el municipio, pero sí de delincuencia común que se hace pasar por estos grupos.












