Una docente de 43 años, oriunda de Popayán, Cauca, falleció por inmersión mientras realizaba una práctica de buceo recreativo en las playas de Taganga, Santa Marta. La tragedia ha generado una investigación sobre los protocolos de seguridad de las escuelas de buceo que operan en este popular destino turístico. La víctima fue identificada como Yudis (o Judy) Milena Agredo Idárraga, profesora de la Institución Educativa Salesianas de Popayán. Los hechos ocurrieron la mañana del martes 7 de octubre en el sector conocido como La Aguja. Agredo Idárraga formaba parte de un grupo guiado por un instructor de la empresa Barracuda Dive Center.
Según testigos, era la primera vez que la mujer realizaba esta actividad y, al parecer, no sabía nadar muy bien, lo que pudo haber complicado la situación. Durante la inmersión, la docente comenzó a presentar dificultades. El instructor la llevó a la superficie y coordinó su traslado al puesto de salud de Taganga, pero a pesar de las maniobras de reanimación, falleció. Las autoridades investigan si el deceso se debió a un infarto, una falla en los equipos de buceo o si la empresa cumplía con todos los protocolos de seguridad.
El instructor fue retenido temporalmente para rendir declaración.
La noticia causó una profunda conmoción en la comunidad educativa de Popayán, donde era recordada como una docente "apasionada, amable y comprometida". Su muerte ha reabierto el debate sobre la regulación y supervisión de las actividades turísticas de alto riesgo en el país.
En resumenLa docente caucana Yudis Milena Agredo Idárraga, de 43 años, murió ahogada durante su primera práctica de buceo en Taganga, Santa Marta. Las autoridades investigan las circunstancias del hecho, incluyendo los protocolos de la escuela de buceo y las posibles causas médicas, para determinar responsabilidades en esta tragedia que enluta a la comunidad educativa de Popayán.