El hallazgo de sus cuerpos con signos de tortura y un mensaje atribuido a un cartel ha generado una fuerte reacción internacional, incluyendo la del presidente Gustavo Petro. La desaparición ocurrió en el exclusivo sector de Polanco en Ciudad de México, y sus cuerpos desmembrados fueron encontrados un día después en el municipio de Cocotitlán. La investigación dio un giro impactante con el hallazgo de un letrero junto a los cuerpos con el mensaje: “Llegó la FM, esto va para todos los chapulines, encargados y vendedores, vamos por todo”, presuntamente firmado por el cartel 'La Familia Michoacana'.
Esto ha llevado a las autoridades mexicanas a manejar como principal hipótesis un ajuste de cuentas.
El presidente Gustavo Petro se pronunció sobre el crimen, responsabilizando a la “mafia internacional” y criticando la política prohibicionista de drogas. Las investigaciones también exploran posibles vínculos de B-King con el narcotráficante Camilo Torres Martínez, alias ‘Fritanga’, de quien el cantante afirmaba ser sobrino político.
Además, se indaga sobre una amenaza que B-King había hecho pública en mayo, relacionada con su expareja, la DJ Marcela Reyes.
Mientras tanto, las familias de los artistas claman por la repatriación de los cuerpos y exigen justicia para que el crimen no quede en la impunidad.