La comunidad de Aguachica, Cesar, está de luto por la muerte de Emma Lucía Rincón Martínez, una niña de dos años, en un accidente de tránsito mientras viajaba con su padre en una motocicleta. El suceso, que quedó registrado en cámaras de seguridad, ha desatado un debate sobre la seguridad vial, el transporte inseguro de menores y la posible responsabilidad penal del progenitor. El accidente ocurrió el martes 9 de septiembre, cuando la motocicleta conducida por Andrés Rincón, padre de la menor, chocó contra un camión estacionado en el barrio Nueva Colombia. La niña viajaba sobre el tanque de la motocicleta, una práctica prohibida por la Ley 2251 de 2022, que impide transportar a menores de diez años en moto.
Algunos testigos afirmaron que el padre conducía distraído, presuntamente mirando su celular.
Emma Lucía sufrió graves lesiones en la cabeza y, aunque fue trasladada al Hospital Regional David Padilla Villafañe, llegó sin signos vitales.
El caso ha generado una profunda consternación, reflejada en las honras fúnebres donde su padre, de rodillas, la despidió con una camiseta que decía: “Tu papá jamás te olvidará”. La Fiscalía evalúa el caso, y Andrés Rincón podría enfrentar un proceso judicial por homicidio culposo, con penas que oscilan entre 32 y 108 meses de prisión, además de multas y la posible suspensión de su licencia de conducción.
En resumenLa muerte de la pequeña Emma Lucía ha conmocionado a Aguachica, no solo por la tragedia en sí, sino por las circunstancias que la rodearon. El caso ha puesto en el centro del debate la responsabilidad de los padres en el transporte de menores y ha motivado una investigación judicial que podría sentar un precedente sobre las consecuencias legales de la imprudencia vial.