Otros cuatro soldados resultaron heridos por las esquirlas.

El Ejército Nacional y el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, rechazaron el acto, calificándolo como una "barbarie", una "grave violación de los derechos humanos y del Derecho Internacional Humanitario". El padre de Danier Felipe Muñoz relató a LA NACIÓN que su hijo llevaba seis años en el Ejército y soñaba con comprar un apartamento para ayudar a su familia de escasos recursos. La familia vivía con la constante preocupación por el peligro de la zona donde servía.

Este crimen se suma a una lista de al menos 11 miembros de la Fuerza Pública del Huila asesinados en lo que va del año 2025, lo que ha llevado a congresistas como Julio César Triana a exigir mayor inversión en tecnología para las Fuerzas Militares.