Jaime Esteban Rendón Rincón, un funcionario de la Alcaldía de Rionegro de 39 años, fue asesinado a tiros en lo que las autoridades han calificado como un presunto acto de intolerancia. El crimen, que ha conmocionado a la comunidad del Oriente antioqueño, ocurrió en la tarde del viernes 29 de agosto en el barrio San Bartolo de San Antonio de Pereira. Rendón, quien además de su labor en la administración municipal se dedicaba a pasear perros, fue atacado por un vecino, presuntamente después de una discusión. Según versiones preliminares de testigos, el conflicto se habría desatado porque uno de los perros que paseaba Rendón ingresó por error a la vivienda del agresor.
“No hubo alegatos ni palabras.
El señor salió y comenzó a dispararle”, relató un testigo.
El presunto homicida, identificado como Jesús Darío Aguirre Bustamante, de 62 años, se entregó voluntariamente a una patrulla de la Policía con el arma de fuego que habría utilizado en el crimen. El alcalde de Rionegro, Jorge Humberto Rivas, lamentó profundamente el hecho, describiendo a Rendón como un “funcionario ejemplar que fue arrebatado de manera injusta”. Asimismo, el gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, expresó su dolor: “Qué fragilidad y qué niveles de violencia estamos enfrentando”. La comunidad de San Antonio de Pereira realizó una velatón en memoria del funcionario, quien era padre de dos hijos, para expresar su solidaridad y rechazar la violencia. La Fiscalía General de la Nación ha asumido la investigación para esclarecer completamente los móviles del homicidio.
En resumenEl asesinato de Jaime Esteban Rendón Rincón en Rionegro pone de manifiesto las trágicas consecuencias de la intolerancia en la sociedad. Este hecho, que le costó la vida a un servidor público y padre de familia por una aparente disputa vecinal, subraya la urgente necesidad de promover la resolución pacífica de conflictos y fortalecer la cultura ciudadana para evitar que la violencia siga cobrando vidas inocentes.