El soldado profesional Esneider Alejandro Pineda Solarte murió en una emboscada en San Andrés de Cuerquia, Antioquia, mientras su unidad intentaba desactivar un artefacto explosivo improvisado. El ataque, ocurrido en la mañana del 28 de agosto, fue atribuido por el Ejército a la estructura 36 de las disidencias de las Farc. Las tropas del Batallón de Infantería N.° 10 Coronel Atanasio Girardot se encontraban realizando una maniobra para retirar el explosivo, que había sido instalado en la vía que comunica San Andrés de Cuerquia con el corregimiento Valle de Toledo.
Durante la operación, fueron hostigados por integrantes del grupo armado, lo que desató un combate.
En el enfrentamiento, Pineda Solarte, oriundo de Santander de Quilichao (Cauca), fue asesinado, y otros dos soldados resultaron heridos.
Los heridos fueron atendidos inicialmente en el hospital municipal y luego trasladados por vía aérea a Medellín para recibir atención especializada.
El Ejército Nacional responsabilizó del ataque a la estructura bajo el mando de alias ‘Primo Gay’, por quien la Gobernación de Antioquia ofrece una recompensa de hasta 100 millones de pesos. La Cuarta Brigada del Ejército calificó el hecho como un “acto terrorista” que viola los derechos humanos y el derecho internacional humanitario, y aseguró que las operaciones militares continúan en la zona para localizar a los responsables.
En resumenLa muerte del soldado Esneider Pineda Solarte en cumplimiento de su deber evidencia el alto riesgo que enfrenta la Fuerza Pública en la lucha contra los grupos armados organizados en Antioquia. El ataque, atribuido a una estructura disidente, subraya la persistencia del conflicto y el uso de artefactos explosivos como táctica de guerra en la región.