Este gesto fue replicado en diferentes municipios que despidieron a sus héroes locales.

En Mongua, Boyacá, se rindieron honores al capitán Francisco Javier Merchán Granados, piloto de la aeronave.

Aipe, Huila, despidió al subintendente José Mario Camacho Aldana.

En Guaitarilla, Nariño, la comunidad homenajeó al patrullero Richard Duván Lagos Calvache.

De manera similar, San Marcos, en Sucre, y Barranquilla, en Atlántico, dieron el último adiós a los patrulleros Rafael Enrique Anaya Almanza y José Daniel Valera Narváez, respectivamente.

Montenegro, Quindío, también se unió al luto con las exequias del patrullero Jhonatan Jiménez, cuyo perro guía, Lester, también pereció en el ataque, una historia de lealtad que ha conmovido al país.

La solidaridad trascendió fronteras, con la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) rindiendo homenaje a los agentes, reafirmando la cooperación binacional contra el narcotráfico y el terrorismo.