El aumento del IVA a los combustibles es una de las propuestas más controvertidas, ya que encarecería los fletes y, por ende, los precios de alimentos y bienes básicos. Gremios como el Comité de Ganaderos del Huila han expresado su preocupación, señalando que el combustible es esencial para toda la actividad agropecuaria y que el aumento de costos "en últimas afectará la canasta familiar". El sector de licores y bebidas también enfrenta un panorama adverso. Camilo Ospina Guzmán, presidente de Asobares, advirtió sobre un "incremento desproporcionado en impuestos a licores, vinos y aperitivos" y una mayor carga sobre cervezas.

Esto, sumado a un gravamen del 19% a espectáculos con entradas superiores a $500.000, podría afectar negativamente al entretenimiento, el turismo y a pequeños comerciantes como los tenderos. Además, la propuesta de subir el IVA a los vehículos híbridos del 5% al 19% es vista como un desincentivo a la transición hacia una movilidad más limpia.

Finalmente, se crean sobretasas para el sector financiero y las industrias extractivas, mientras que las iglesias deberían tributar por sus actividades comerciales.