Ciudades como Florencia, que llevaba más de 12 años sin una revisión completa, han iniciado este proceso para corregir desigualdades, ya que muchas propiedades nuevas no estaban contribuyendo adecuadamente a las arcas municipales.
Gustavo Adolfo Marulanda, director del IGAC, destacó que la actualización permite “distribuir de manera justa la carga impositiva entre todos los ciudadanos”. De manera similar, en Rionegro (Antioquia), la Asociación de Municipios del Altiplano del Oriente Antioqueño (Masora) está llevando a cabo la actualización catastral multipropósito, un proceso que no se realizaba en la zona rural desde hace 15 años.
El objetivo, según el subsecretario Felipe Puerta Jaramillo, es “generar justicia tributaria” mediante avalúos técnicos y actualizados.
Estos procesos son fundamentales para que los gobiernos locales cuenten con recursos para financiar sus planes de desarrollo e inversión en servicios como salud, educación y seguridad, basándose en una valoración más precisa y actual del patrimonio inmobiliario de sus jurisdicciones.