Esta herramienta busca simplificar el trámite para personas con rentas de trabajo, capital, no laborales o de pensiones.

Sin embargo, la DIAN aclara que es una alternativa editable y no una "verdad absoluta", por lo que el contribuyente es responsable de verificar, completar y corregir la información según su realidad económica, añadiendo datos como patrimonio, deudas o deducciones no incluidas.

Paralelamente, la entidad ha advertido sobre el aumento de estafas digitales. A través de sus redes sociales, ha denunciado la circulación de mensajes falsos y enlaces sospechosos que buscan robar información personal y financiera de los contribuyentes. La recomendación principal es no abrir correos o mensajes de texto de remitentes desconocidos y realizar todos los trámites exclusivamente a través del portal oficial de la DIAN.