El beneficio está dirigido a las personas naturales que perciben sus ingresos principalmente por honorarios, comisiones, prestación de servicios o contratos por cuenta propia.
La DIAN explicó que el mecanismo no es una exención ni una reducción de la base gravable, sino un descuento directo que se aplica sobre el impuesto liquidado. Por ejemplo, si un trabajador independiente debía cancelar 4 millones de pesos de impuesto, con el descuento solo pagará 3 millones. Para acceder a este beneficio, que se reflejará automáticamente en el proceso de liquidación, los contribuyentes deben contar con los soportes de una serie de gastos y pagos deducibles. Entre los documentos requeridos se encuentran certificados de pago de intereses por préstamos para vivienda, pagos de salud, impuestos locales como el ICA y el predial, certificados de donaciones o inversiones, y facturas legales de los gastos necesarios para el desarrollo de su actividad económica.
La entidad ha reiterado que no es necesario realizar trámites adicionales ni inscripciones especiales, pero es fundamental que todos los soportes hayan sido emitidos por las entidades correspondientes y estén debidamente organizados.