Tres mujeres, identificadas como Jackeline Bedoya Acevedo, María Paola Arango Garrillo y Michel Chaverra Jaramillo, fueron capturadas y enviadas a prisión preventiva.

Según la Fiscalía, estas personas ofrecían procedimientos como la 'lipólisis láser con transferencia glútea' en inmuebles de barrios como Laureles, San Javier, Guayabal y Olaya Herrera.

Las investigaciones revelaron que las acusadas no poseían la idoneidad ni la experiencia para realizar cirugías, administrar anestesia o gestionar el cuidado postoperatorio. Los procedimientos se realizaban sin las mínimas condiciones de asepsia y con instrumental sin la esterilización adecuada, lo que provocó “contaminación cruzada y el desarrollo de infecciones por esas bacterias no tuberculosas”.

Las víctimas, que incluyen mujeres de otras ciudades y del extranjero, sufrieron cuadros infecciosos, deformidades permanentes y limitaciones funcionales.

Cuando intentaban reclamar, encontraban que los locales habían sido abandonados.

A las procesadas se les imputaron los delitos de concierto para delinquir, estafa agravada en modalidad de delito masa y lesiones personales dolosas, cargos que no aceptaron.