En medio del forcejeo, el hombre fue despojado de su pantalón y recibió una golpiza por parte de la multitud enfurecida.

Las imágenes que se viralizaron en redes sociales muestran al sujeto colgado de la ventana, semidesnudo y siendo agredido, mientras los ciudadanos gritaban “¡No lo vayan a dejar ir!”.

Finalmente, fue entregado a la Policía Nacional.

Este suceso pone de relieve no solo una modalidad de hurto recurrente en el transporte público, conocida como 'raponazo', sino también el alarmante fenómeno de la justicia por mano propia, una respuesta cada vez más común de los ciudadanos ante la percepción de inseguridad e impunidad.