Luis Almagro, exsecretario general de la OEA, también respaldó las acciones militares, afirmando que no puede haber “libertad de navegación ni cielos abiertos para los narcotraficantes”. Estas posturas reflejan un endurecimiento del discurso de un sector de la derecha regional, que ve en la ofensiva de Washington una oportunidad para un cambio de régimen en Venezuela.