El portavoz Dmitri Peskov mencionó que ambos países mantienen una “comunicación constante” y están unidos por “obligaciones contractuales” que podrían incluir cooperación en defensa. Por su parte, el diputado Alexéi Zhuravliov aseguró que Moscú ya está suministrando ayuda militar a Venezuela.

Este respaldo se produce mientras el gobierno de Maduro recibe más material bélico ruso, en un claro mensaje de disuasión hacia Washington. La postura de Rusia se enmarca en una competencia geopolítica más amplia, donde busca proyectar su poder en el hemisferio occidental y contrarrestar la influencia estadounidense. Analistas consideran que este apoyo, aunque de carácter principalmente defensivo, incrementa el riesgo de una confrontación indirecta entre potencias en la región.