Su reacción inicial, según se conoció, fue de sorpresa y emoción: “Oh mi Dios… No tengo palabras”.

Posteriormente, dedicó el premio a la sociedad venezolana, afirmando que es “un logro de toda una sociedad”. El galardón, que incluye una dotación económica de 11 millones de coronas suecas (aproximadamente 4.500 millones de pesos colombianos), representa un espaldarazo internacional a las fuerzas democráticas en Venezuela. Sin embargo, existe incertidumbre sobre si Machado podrá viajar a Oslo en diciembre para recibir el premio, debido a la “situación de seguridad seria que hay que resolver primero”, según admitió el comité. Este reconocimiento no solo honra su trayectoria de más de dos décadas, sino que también envía un poderoso mensaje de respaldo a la vía electoral y pacífica, resumida en su lema “votos en vez de balas”.