UU. para capturar a Maduro.

Al mismo tiempo, el gobierno colombiano ha tomado medidas para reforzar la seguridad en la volátil frontera de más de 2.200 kilómetros. En una acción coordinada con Venezuela, Petro ordenó el despliegue de 25.000 soldados en la región del Catatumbo, una zona con fuerte presencia de grupos armados como el ELN y disidencias de las FARC. Esta movida se enmarca en la "Operación Binacional de Soberanía, Paz y Seguridad Absoluta", que busca combatir el narcotráfico de manera conjunta.

Nicolás Maduro agradeció públicamente a Petro por su "posición patriótica y bolivariana", afirmando que "quien se mete con Venezuela se mete con Colombia".

Esta dualidad refleja el complejo rol de Colombia como un actor clave que busca evitar un conflicto regional mientras atiende sus propias urgencias de seguridad interna.