El propio Maduro declaró que los “15.000 hombres y mujeres bien armados, bien entrenados y bien preparados” tienen la misión de “blindar la frontera”.
El mandatario venezolano afirmó que se han adelantado conversaciones con el ministro de Defensa de Colombia para sincronizar operaciones conjuntas, aunque no se ofrecieron detalles específicos sobre dicha colaboración.
En su discurso, Maduro insistió en que Venezuela “es territorio limpio y libre del narcotráfico” y que solo un 5% de la cocaína producida en Colombia intenta cruzar su frontera. Aprovechó para criticar la efectividad del Plan Colombia y la presencia de bases militares estadounidenses en el país vecino, alegando que la producción de cocaína se ha “duplicado o triplicado” cerca de dichas instalaciones. Esta movilización se produce en un contexto de creciente presión internacional, especialmente de Estados Unidos, por el supuesto rol de Venezuela en el tráfico de drogas, lo que dota a la operación de un componente tanto de seguridad interna como de afirmación de soberanía.