La empresa estatal ucraniana Naftogaz ya ha firmado un memorando con la compañía griega ATLANTIC-SEE para formalizar esta operación.

Además, el acuerdo incluye un mecanismo de financiación de cerca de 2.000 millones de euros para compensar las pérdidas de producción de gas que Ucrania ha sufrido debido a los ataques rusos. Este respaldo financiero, que cuenta con el apoyo de bancos europeos, la Comisión Europea y otros aliados, busca asegurar que el país pueda acceder a volúmenes suficientes para afrontar el invierno, incluso con sus propias redes de extracción afectadas. Este movimiento estratégico no solo fortalece la capacidad de Ucrania para resistir la presión energética de Moscú, sino que también se alinea con los esfuerzos de sus socios europeos y estadounidenses para garantizar la sostenibilidad de sus importaciones.