Esta postura choca directamente con las condiciones que, según Zelenski, exige Rusia para negociar.

El mandatario ucraniano aseguró que Moscú demanda la retirada total de las fuerzas ucranianas de la región de Donetsk como condición previa para cualquier conversación de paz, una exigencia que Kiev considera inaceptable. Esta brecha fundamental entre las posiciones de ambos países evidencia la enorme dificultad para alcanzar un acuerdo negociado, a pesar de la presión internacional. Zelenski también calificó de “positivo” su último encuentro con Trump, en el que el presidente estadounidense insistió en que Ucrania aún podría “ganar” la guerra, mostrando las complejidades y contradicciones de la diplomacia actual.