Este anuncio refleja una profunda reevaluación de la política de defensa de Alemania, tradicionalmente más contenida, y su disposición a asumir un papel de liderazgo en la seguridad europea. La militarización del espacio, un sector que durante décadas fue un ámbito de cooperación pacífica, se acelera, aumentando el riesgo de un enfrentamiento a gran escala en esta nueva frontera.