La victoria del PAS fue celebrada por líderes europeos, incluyendo la Comisión Europea y el presidente ucraniano Volodímir Zelenski, quienes la calificaron como "una victoria para Europa". El resultado consolida el mandato de la presidenta Sandu para avanzar en las negociaciones de adhesión a la UE, un proceso que se ha acelerado desde la invasión rusa a Ucrania en 2022 y que refleja la creciente división geopolítica en la región.