Al recibirlo, Trump comentó: "No me lo puedo creer, ¡me encanta!
", refiriéndose al traje negro de líneas castrenses diseñado por el ucraniano Viktor Anisimov.
El propio periodista que había criticado su atuendo anterior, Brian Glenn de Real America's Voice, esta vez lo alabó diciendo: "presidente Zelenski, usted se ve fabuloso con ese traje". Este cambio en la recepción de su indumentaria, que Zelenski ha prometido mantener hasta el fin de la guerra, simboliza un ambiente diplomático mucho más relajado y constructivo. La moda, en este contexto, sirvió como un barómetro visible de la relación entre los líderes, pasando de ser un punto de fricción a un gesto de afabilidad en medio de negociaciones cruciales sobre el futuro de la guerra.