El Ideam advirtió sobre lluvias moderadas a fuertes en el Magdalena, especialmente en la Sierra Nevada, lo que ha provocado que ríos como el Guachaca, Palomino, Don Diego, Manzanares y Gaira alcancen niveles críticos.

Esta situación pone en alerta a las poblaciones ribereñas.

En el perímetro urbano, el riesgo es palpable. En el barrio San Jorge, más de cincuenta familias viven en zozobra por el peligro de deslizamientos.

Un vocero de la comunidad, Rafael Ibáñez, expresó su preocupación: “Estamos preocupados porque cada aguacero aumenta las grietas en la montaña.

Aquí hay niños, adultos mayores y familias enteras que podrían quedar sepultadas si no se actúa a tiempo”.

Adicionalmente, el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Santa Marta realizó inspecciones que determinaron un alto riesgo de colapso en tres viviendas ubicadas en los sectores de Cerro Libertador, San Fernando y Colinas del Río, recomendando la reubicación inmediata en el caso más grave y reparaciones urgentes en los otros. Este panorama evidencia una emergencia generalizada que requiere una acción coordinada e inmediata de las autoridades de gestión del riesgo.