La capital de Risaralda da un paso histórico en materia de saneamiento ambiental con la aprobación del documento CONPES que viabiliza la construcción de su Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR). El anuncio, realizado por el alcalde de Pereira, Mauricio Salazar Peláez, representa la culminación de años de gestión y marca un hito para el futuro sostenible de la ciudad. La construcción de la PTAR es un proyecto de infraestructura de gran envergadura que impactará directamente la calidad de vida de los pereiranos y la salud de las fuentes hídricas que atraviesan la urbe. La financiación y ejecución de esta obra es el resultado de un esfuerzo articulado entre múltiples entidades, incluyendo el Gobierno Nacional, la empresa Aguas y Aguas de Pereira, la Alcaldía de Dosquebradas, Serviciudad y la Corporación Autónoma Regional de Risaralda (CARDER). Esta colaboración interinstitucional subraya la importancia estratégica del proyecto no solo para Pereira, sino para toda el área metropolitana.
La planta permitirá tratar un porcentaje significativo de las aguas residuales domésticas e industriales que actualmente se vierten sin tratamiento a los ríos, mitigando la contaminación, protegiendo la biodiversidad y cumpliendo con la normativa ambiental nacional. A largo plazo, se espera que la operación de la PTAR genere beneficios económicos y sociales, como la valorización de predios aledaños a los ríos saneados y la posibilidad de desarrollar nuevos proyectos turísticos y recreativos en sus riberas.
Este avance posiciona a Pereira como una de las ciudades intermedias líderes en gestión ambiental y saneamiento básico en Colombia, abordando una deuda histórica con sus ecosistemas y sentando las bases para un desarrollo urbano más responsable y en armonía con el medio ambiente.
En resumenLa aprobación del CONPES para la PTAR de Pereira es un logro fundamental que garantiza los recursos y el respaldo para una obra esencial de saneamiento. Este proyecto, fruto de la cooperación interinstitucional, mejorará la calidad del agua de los ríos locales, protegerá el medio ambiente y promoverá un desarrollo urbano más sostenible para la ciudad y el área metropolitana.