En el marco de las Fiestas de Pereira, el icónico viaducto César Gaviria Trujillo se iluminó con un homenaje de luces organizado por la Alcaldía de Dosquebradas. El evento se destacó por su planificación logística, ya que se llevó a cabo sin generar cierres de carriles ni restricciones de tránsito en esta arteria vital que conecta a las dos ciudades. La decisión de no afectar la movilidad en el viaducto durante el espectáculo de luces fue un acierto logístico y de planificación por parte de la administración de Dosquebradas, liderada por el alcalde Roberto Jiménez Naranjo. El viaducto es el principal corredor entre Pereira y su municipio vecino, y cualquier cierre, por breve que sea, suele causar grandes congestiones que afectan a miles de ciudadanos. Al garantizar el flujo vehicular normal, se permitió que el homenaje se integrara a la vida cotidiana de la ciudad sin generar molestias, un aspecto clave para la buena recepción de los eventos públicos.
Este acto, impulsado desde el municipio vecino, también tiene un fuerte componente simbólico.
Representa un gesto de hermandad y cooperación entre Pereira y Dosquebradas, que conforman una única área metropolitana con dinámicas sociales y económicas profundamente entrelazadas. Que Dosquebradas organice un evento para celebrar las fiestas de Pereira refuerza los lazos intermunicipales y promueve una visión de región. El uso del viaducto como escenario para un evento cultural resalta su valor no solo como una obra de ingeniería, sino como un ícono del paisaje urbano y un punto de encuentro simbólico para los habitantes del área metropolitana.
En resumenEl homenaje de luces en el viaducto fue un evento exitoso de las Fiestas de Pereira, destacando por una ejecución que no afectó la movilidad y por su simbolismo de unidad metropolitana. La iniciativa demostró que es posible realizar actos culturales de gran impacto visual sin perturbar la cotidianidad de los ciudadanos.