358, buscó crear un ambiente propicio para que los jóvenes ejercieran su derecho al voto.

La medida estuvo vigente desde las 6:00 p.m. del sábado 18 de octubre hasta las 6:00 a.m. del lunes 20 de octubre, completando un periodo de 36 horas.

Durante este tiempo, se prohibió la venta y el consumo de bebidas embriagantes en todo el territorio municipal, abarcando tanto la zona urbana como la rural. El objetivo principal de la ley seca, según la administración, fue “preservar el orden público y garantizar un ambiente seguro para la jornada electoral”. Además de la restricción sobre el alcohol, el decreto incluyó la prohibición de circulación de vehículos de carga pesada que transportaran materiales pirotécnicos, combustibles o sustancias peligrosas, como una medida preventiva adicional. Las autoridades municipales advirtieron que se realizarían operativos de verificación para asegurar el cumplimiento de la normativa. Aquellos que infringieran la medida se exponían a sanciones conforme al Código Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana, que pueden incluir comparendos o medidas correctivas.

La Alcaldía hizo un llamado a la colaboración de establecimientos comerciales como bares, tiendas y restaurantes, así como a la ciudadanía en general, para acatar las disposiciones y contribuir al desarrollo pacífico y ordenado del proceso electoral juvenil.