La situación fue presenciada por la esposa de un trabajador de la finca, quien alertó de inmediato a las autoridades, lo que desencadenó una respuesta inmediata y coordinada. El Gaula Militar, la Policía Nacional y el Ejército Nacional activaron un "plan candado" para cerrar las vías de acceso y salida de la zona. La operación fue apoyada por la tecnología de la Alcaldía de Palmira, incluyendo cámaras de reconocimiento facial y de vehículos, que permitieron ubicar la camioneta en la que se movilizaban los captores. Al verse acorralados por la persecución, los delincuentes abandonaron el vehículo en el sector de El Bolo y huyeron entre los cañaduzales. El señor Tanaka fue encontrado dentro del automotor, golpeado pero en buen estado de salud. El funcionario de la Alcaldía de Palmira, MY (RA) Pablo Cerón, declaró: “Gracias a una comunicación oportuna a nuestra línea de emergencia, pudimos activar todos nuestros dispositivos electrónicos, nuestro sistema de cámaras y nuestro sistema de inteligencia artificial junto con el Plan Candado físico de las unidades en tierra, que le permitieron presionar a los delincuentes de forma tal que ellos desistieron de su actividad”. Las autoridades investigan la autoría del hecho, en una zona con presencia de disidencias de las FARC.