Estas medidas reflejan una estrategia que combina la respuesta operativa con la prevención y la articulación entre el sector público y privado. La capacidad de respuesta de la administración fue puesta a prueba recientemente durante un incendio de residuos de cosecha de caña de azúcar en un predio privado del corregimiento del Bolo Alizal. El equipo operativo de la DGRD, con el apoyo inicial del Cuerpo de Bomberos, coordinó la intervención de las brigadas de emergencia del propio predio, logrando controlar la conflagración tras un operativo que se extendió hasta altas horas de la noche. Este incidente subraya la importancia de la colaboración público-privada, un enfoque que el gobierno del alcalde Víctor Ramos ha formalizado con la creación, por primera vez, de una mesa de atención de incendios forestales que integra a la administración municipal, el sector privado y a Asocaña. Adicionalmente, la DGRD realizó un seguimiento posterior en la zona para verificar la situación y asegurar que no quedaran focos activos.
A raíz de estos eventos, desde Gestión del Riesgo se hizo un llamado a las empresas para que sus brigadas de emergencia se preparen para actuar oportunamente.
En paralelo a la respuesta operativa, la Alcaldía ha lanzado una campaña de prevención dirigida a la ciudadanía. El director de Gestión del Riesgo, Abelardo Angulo Cabezas, expresó su preocupación por la recurrencia de incendios en ciertos lotes baldíos, como uno identificado en el sector de La Italia, que atentan contra la salud de los habitantes y el medio ambiente.
Según el funcionario, estos incendios a menudo se originan por elementos arrojados que, debido a las altas temperaturas, generan conflagraciones.
Por ello, se insta a la comunidad a denunciar cualquier situación sospechosa a través de las líneas habilitadas de la Policía Ambiental, Bomberos, la DGRD y entidades de Asocaña.