Estas intervenciones buscan proteger ecosistemas estratégicos y combatir actividades ilícitas asociadas a estas invasiones.

En el Cerro Pan de Azúcar, un área clasificada como suelo forestal protector y zona arqueológica, la Secretaría de Gestión y Control Territorial demolió 10 construcciones ilegales, recuperando 505 metros cuadrados de terreno. Estas edificaciones precarias, hechas de madera, plástico y láminas, fueron detectadas gracias al monitoreo con imágenes satelitales que la Secretaría utiliza desde 2021 para identificar cambios en el uso del suelo.

Tras la demolición, se anunció una “sembratón” comunitaria para restaurar el ecosistema.

Paralelamente, en el área de expansión Pajarito, en San Cristóbal, se identificaron 17 construcciones irregulares en un bien de uso público. Según las autoridades, algunas de estas estructuras eran utilizadas para actividades económicas informales e incluso como puntos de venta de estupefacientes. El subsecretario de Control Urbanístico, Carlos Trujillo Vergara, señaló que en San Cristóbal se han realizado más de 200 revisiones por ocupaciones irregulares, destacando los desafíos de control en un territorio de rápido crecimiento. Los informes técnicos elaborados servirán de base para aplicar medidas de restitución del espacio público.