El proyecto del Metro de la 80, una de las obras de infraestructura más importantes para el futuro de Medellín, alcanzó un hito significativo con la culminación del traslado de redes subterráneas en el sector de Rinconcito Ecuatoriano. Esta fase, que duró 16 meses, era crucial para despejar el corredor por donde pasarán las vías del nuevo sistema de transporte masivo. Los trabajos consistieron en la reubicación de 246 metros de redes de alcantarillado y la construcción de cuatro estructuras de inspección (manholes) entre las carreras 67 y 69, en el barrio Córdoba. Según Tomás Elejalde Escobar, gerente del Metro de Medellín, la intervención se realizó utilizando una “metodología de construcción sin zanja”, una técnica innovadora que permitió ejecutar las obras sin afectar significativamente el tráfico vehicular ni la vida cotidiana de un sector con alta actividad comercial. “Es un trabajo pionero para obras similares que haremos en el corredor”, afirmó Elejalde.
A pesar de los avances en terreno, el proyecto ha enfrentado dificultades financieras por retrasos en los desembolsos del Gobierno Nacional.
Sin embargo, con recursos propios del Distrito y créditos, la obra continúa. El avance general del proyecto se sitúa en un 42 %, con un 49.45 % de ejecución en las demoliciones de predios en San Germán, un 84 % en la construcción del patio-taller y un 81 % en la del multitubular que suministrará energía al sistema desde una subestación de EPM. Este proyecto beneficiará a más de un millón de habitantes del occidente de la ciudad, mejorando la movilidad y la calidad de vida.
En resumenLa finalización del traslado de redes subterráneas en el barrio Córdoba marca un progreso técnico fundamental para el Metro de la 80, demostrando la capacidad de ejecución del proyecto a pesar de los desafíos financieros y logísticos.