La situación, agravada por la segunda temporada de lluvias, ha puesto a prueba la capacidad de respuesta de los organismos de socorro y ha activado un monitoreo constante sobre las cuencas hídricas del Distrito. Las lluvias de los últimos días generaron un total de 115 reportes de emergencia a través de la línea 123. Las zonas más afectadas fueron las comunas de la ladera occidental, principalmente Belén (Comuna 16), Laureles (Comuna 11), Robledo (Comuna 7) y el corregimiento de Altavista. En este último, la creciente súbita de la quebrada homónima en el sector Mano de Dios causó una de las mayores afectaciones. El alcalde Federico Gutiérrez informó que, gracias a obras hidráulicas preventivas, se evitó una emergencia de mayor magnitud en la zona. Las inundaciones en vías públicas colapsaron la movilidad en puntos neurálgicos como la Avenida 80 en el sector La Floresta, el barrio Naranjal y el deprimido de la Feria de Ganado.
Durante las emergencias, un motociclista fue arrastrado por una corriente, pero fue rescatado a tiempo por los bomberos.
Además, un deslizamiento en el sector Olaya Herrera de Robledo provocó el colapso de una vivienda de madera, sin dejar personas lesionadas. Como medida preventiva, la Administración Distrital ha intensificado el monitoreo de las 20 cuencas que abastecen los acueductos veredales y de 3.070 hectáreas de reservas naturales para anticipar riesgos de obstrucciones o deslizamientos.













