El proyecto, que había logrado validar más de 2.18 millones de firmas ciudadanas, buscaba modificar el artículo 298 de la Constitución para permitir que los departamentos recaudaran y administraran directamente los impuestos de renta y patrimonio generados en sus territorios.
La propuesta fue derrotada con ocho votos en contra, siete a favor y cinco ausencias notables, incluyendo las de las senadoras del Centro Democrático, partido del gobernador, María Fernanda Cabal y Paloma Valencia.
El gobernador Rendón lamentó la decisión y responsabilizó al gobierno central. “Con esta decisión pierden las regiones y gana el centralismo. Celebran quienes quieren controlar la riqueza que se genera en las regiones pero que se concentra y maneja desde el asfixiante gobierno central”, declaró, señalando al presidente Gustavo Petro como el principal opositor.
Según Rendón, de los 40 billones de pesos que Antioquia aportó a la nación el año anterior, solo recibió 6 billones de vuelta.
Sin embargo, la iniciativa también enfrentó críticas por su potencial impacto en la equidad territorial.
Opositores argumentaron que el referendo beneficiaría principalmente a los departamentos más ricos como Antioquia y Bogotá, en detrimento de las regiones más pobres que dependen del Sistema General de Participaciones para financiar servicios básicos. A pesar del hundimiento, el gobernador se mostró desafiante: “Soy hombre de fe y muy perseverante: tenemos tres alternativas legales para regresar con esta discusión al Congreso de la República”.