El ICM es una herramienta que evalúa el progreso de los municipios en seis dimensiones fundamentales: gobernanza, productividad, seguridad, sostenibilidad, ciencia, tecnología e innovación, y equidad e inclusión social. El estudio es descrito como una “radiografía anual de las capacidades urbanas del país” y destaca las fortalezas de Manizales en factores como la innovación, la sostenibilidad, la educación, la infraestructura y un sólido entorno institucional.

Según Nicolás Rincón Munar, subdirector del DNP, el índice permite “enfocar las políticas públicas” y avanzar hacia una “planeación territorial inteligente”.

Los resultados también evidencian que las aglomeraciones urbanas como Manizales son motores del desarrollo nacional.

En particular, la ciudad sobresale en la dimensión de Ciencia, Tecnología e Innovación, donde superó los 90 puntos, demostrando su capacidad para generar conocimiento y desarrollo tecnológico. Este reconocimiento no solo refuerza la reputación de Manizales, sino que también valida los esfuerzos sostenidos de la administración local y sus aliados para mejorar la calidad de vida y construir un entorno económico e institucional robusto y competitivo a nivel nacional.