Por un lado, a escala departamental, los municipios de Caldas, con Manizales como su capital y principal centro urbano, se encuentran en un proceso activo de revisión de las inversiones y los avances del Plan Departamental de Agua. Esta iniciativa estratégica, que reúne a alcaldes y representantes locales, busca abordar las necesidades y prioridades de cada territorio en materia de acueducto y saneamiento básico.

La discusión se centra en los retos que enfrentan para la prestación de servicios públicos, lo que sugiere un esfuerzo coordinado para fortalecer la infraestructura y asegurar la sostenibilidad del suministro a largo plazo en toda la geografía caldense. Por otro lado, en el ámbito de la gestión inmediata y la comunicación ciudadana, Manizales fue escenario de una acción clave para mantener la confianza pública. Las autoridades competentes desmintieron de manera categórica un rumor que circulaba sobre un corte de agua programado para el fin de semana del 17 y 18 de agosto de 2025. Esta aclaración fue fundamental para evitar el pánico y la desinformación entre los residentes de la ciudad, demostrando la importancia de una comunicación oficial, clara y oportuna por parte de las entidades prestadoras del servicio. La combinación de estos dos eventos subraya un enfoque integral en la gestión del agua: mientras se planifica el futuro del recurso a nivel regional, se protege la estabilidad del servicio diario en la capital, respondiendo con celeridad a las preocupaciones de la población.