La derrota 2-0 ante FC Juárez fue el detonante para finalizar el vínculo contractual de mutuo acuerdo. La situación de Berizzo se había vuelto insostenible después de que el equipo acumulara cuatro partidos consecutivos sin conocer la victoria, una racha que culminó con la derrota en casa de Juárez. La presión de la afición era palpable, especialmente durante el empate previo contra Mazatlán, donde se escucharon cánticos pidiendo su salida. Tras el partido contra Juárez, el propio Berizzo admitió en rueda de prensa la necesidad de reflexionar, afirmando que no era prudente “tomar decisiones en caliente”. Horas después, el club emitió un comunicado oficial confirmando la renuncia del técnico, la cual describió como “un acto de nobleza pocas veces visto en el fútbol”. En el texto, la institución destacó la integridad de Berizzo, señalando que “siempre puso por delante las necesidades del grupo, del equipo, de los jugadores y de las personas que hacen parte de la institución”. La salida del estratega argentino, quien había defendido públicamente a James Rodríguez de las críticas, deja al jugador colombiano “a la deriva”, como titularon algunos medios, a la espera de un nuevo cuerpo técnico que definirá su rol en el equipo. La prensa mexicana ya especula con posibles reemplazos, entre los que suenan nombres como Jorge Almirón y Martín Anselmi, lo que abre un nuevo capítulo de incertidumbre para el futuro inmediato de James en la Liga MX.