Esta frase, cargada de ambigüedad, fue el detonante para que medios y aficionados comenzaran a debatir sobre su continuidad. La narrativa de un posible retiro fue reforzada por una publicación de Daniela Ospina, hermana de David Ospina y expareja de James, quien afirmó que el Mundial de 2026 “quizás marcará el fin de leyendas”, en una clara alusión a la generación de la que ambos jugadores son parte. Los artículos describen el momento como “melancólico” y “emotivo”, sugiriendo que el jugador, quien cumplirá 34 años en 2026, es consciente de que su tiempo en la élite del fútbol podría estar llegando a su fin. Aunque Néstor Lorenzo ha defendido su vigencia, asegurando que “todavía tiene hambre”, la percepción general es que esta clasificación tiene un sabor a despedida para varios referentes, con James como el símbolo principal de una era que podría concluir en Norteamérica.