Le dijeron: ‘Venga, jovencito; bájele, hermano.
Qué pena, pero usted aquí no se ha ganado ningún derecho’”, aseguró el comunicador.
Esta intervención subraya el rol de los jugadores más experimentados para mantener la disciplina y el respeto dentro del plantel, especialmente ante las recurrentes polémicas que han rodeado a Durán. El altercado no habría pasado desapercibido para el cuerpo técnico, y se especula que podría ser un factor considerado por Néstor Lorenzo en futuras convocatorias.
Curiosamente, este episodio también ha generado un debate sobre el estilo de liderazgo de James. El periodista Juan Felipe Cadavid señaló que, a diferencia de figuras como Radamel Falcao o el mismo Ospina, cuya seriedad impone respeto inmediato, James es percibido por sus compañeros como “uno más”, alguien con quien se puede bromear incluso después de un llamado de atención. Esta percepción no demerita su influencia, pero sí la diferencia de la de otros capitanes históricos.