Bohbot, de 36 años y uno de los productores del festival de música, fue capturado mientras intentaba huir del ataque.

Un video difundido ese día lo mostró herido y esposado, una imagen que impulsó una intensa campaña internacional por su liberación.

Tras más de dos años, su retorno se concretó en el marco del acuerdo de paz.

Fue trasladado al hospital Tel Hashomer, donde se reencontró con su esposa, Rebecca González, y su hijo.

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, celebró la noticia y expresó su deseo de recibir a la familia en Colombia: “Ojalá vengan a Colombia para recibirlos con el amor del pueblo colombiano”. Durante el cautiverio de Bohbot, el gobierno colombiano le concedió la nacionalidad en un gesto diplomático para facilitar las negociaciones y brindó acompañamiento constante a su familia. Su caso se convirtió en uno de los más seguidos, y las imágenes de su emotivo reencuentro familiar han recorrido el mundo como un testimonio de resistencia y esperanza en medio del conflicto.