El Gobierno de Colombia ha adoptado una postura contundente contra las acciones de Israel en Gaza, implementando una serie de medidas que incluyen la ruptura de relaciones diplomáticas, la prohibición de exportaciones de carbón y la donación de ayuda humanitaria. Estas acciones reflejan el liderazgo que busca asumir el país en la defensa de los derechos humanos y su solidaridad con el pueblo palestino. Como parte de su respuesta a la crisis, Colombia donó 200.000 dólares a través de la Agencia Presidencial de Cooperación Internacional (APC). Estos fondos se destinaron a cinco organizaciones que operan en Gaza, con el fin de financiar programas de salud, nutrición, protección de menores y apoyo psicosocial.
Esta ayuda humanitaria se enmarca en una política exterior más amplia y crítica hacia Israel. En mayo de 2024, el país rompió relaciones diplomáticas, una de las decisiones más drásticas tomadas en la región. Más recientemente, el gobierno del presidente Gustavo Petro oficializó un decreto que prohíbe totalmente las exportaciones de carbón a Israel. La prohibición, descrita como una "victoria moral" para el gobierno, estará vigente hasta que Israel cumpla con las órdenes de medidas provisionales emitidas por la Corte Internacional de Justicia. El Gobierno colombiano ha condenado públicamente el uso del hambre como arma de guerra y el desplazamiento forzado, exigiendo el respeto al derecho internacional humanitario y posicionándose como una de las voces más críticas de América Latina frente al conflicto.
En resumenColombia ha materializado su condena a las acciones de Israel en Gaza a través de acciones diplomáticas, económicas y humanitarias concretas, incluyendo la ruptura de relaciones, la prohibición de exportar carbón y la donación de fondos, posicionándose como un actor solidario con Palestina.