¿Dónde está su vergüenza?".
La manifestación masiva y la huelga nacional, que contó con el apoyo de universidades y empresas, reflejan una creciente presión interna sobre el gobierno para que opte por la vía diplomática, especialmente ahora que Hamás ha aceptado una propuesta de tregua. Los manifestantes portaban carteles con los rostros de los rehenes y lemas como "basta", mostrando un claro descontento con la gestión de la guerra.