Esta reducción de 2,6 puntos porcentuales equivale a la creación de aproximadamente 20.000 nuevos puestos de trabajo, pasando de 201.762 a 221.642 personas ocupadas. La secretaria de Desarrollo Económico, Naydú Romero, destacó que “con esta reducción, Ibagué completa cinco caídas consecutivas en la tasa de desempleo en lo corrido del año, consolidando una senda favorable para la economía local”. Otros indicadores positivos incluyen la disminución de la informalidad, que pasó del 49,9 % al 47,3 %, y un notable aumento del 10,7 % en el empleo formal.
Estrategias como el Festival del Camello, una feria laboral extendida a las comunas, y alianzas con el sector privado han contribuido a estos resultados. Incluso el desempleo juvenil, un indicador históricamente crítico, mostró una leve mejoría al descender del 22,3 % al 21,3 %.
A pesar de los avances, el desafío para la ciudad es mantener este ritmo de recuperación para salir del podio de las ciudades con más desocupación.