La Gobernación del Tolima, a través de su secretario de Educación, Andrés Bedoya, justificó la interrupción del servicio argumentando un déficit presupuestal y responsabilizando al Gobierno Nacional por no adicionar los recursos necesarios. Bedoya advirtió que, sin una inyección de capital por parte de la Nación, el programa no solo se suspendería, sino que se terminaría definitivamente el 26 de septiembre. En contraparte, el Gobierno Nacional, representado por el ministro de Educación, Daniel Rojas, y el director de la Unidad de Alimentación Escolar (UApA), Sebastián Rivera, rechazó estas afirmaciones, calificándolas de “injuriosas” y atribuyendo la crisis a una “mala planeación” de la administración departamental. Para sustentar su postura, el Ministerio de Educación reveló que los fondos para el PAE en Tolima aumentaron un 62 % entre 2022 y 2024, y que ya se ha transferido el 98 % de los recursos asignados para 2025, que ascienden a 60 mil millones de pesos. Rivera fue enfático al señalar que “los recursos están, se han girado, y el gobierno departamental también tiene la responsabilidad y la obligación legal de cofinanciar el programa”. El Ejecutivo también cuestionó la drástica reducción del aporte propio de la Gobernación, que pasó de $15.183 millones en 2024 a solo $1.170 millones en 2025, así como el elevado costo por ración en el departamento, de $8.379, muy por encima del promedio nacional de $6.000.

Gobierno acusa a Gobernación del Tolima de “mala planeación” en la crisis del PAE