A pesar de que la Policía confirmó el hallazgo mediante drones, cuando una comisión humanitaria acudió a recuperarlos, los restos habían desaparecido misteriosamente. Este hecho ha generado zozobra en la comunidad, que lo atribuye a la falta de presencia estatal y a la influencia de grupos armados que operan en la zona, evidenciando el miedo y la sensación de abandono que enfrentan los habitantes.