La violencia contra la Fuerza Pública en Cali registró un nuevo episodio cuando una patrulla de la Policía Metropolitana fue atacada con un fusil en el barrio Manuela Beltrán, al oriente de la ciudad. El incidente, que dejó un saldo de cuatro personas heridas, incluido un uniformado, ocurrió mientras los agentes respondían a un presunto llamado de robo a través de la línea de emergencia 123. Según el reporte de las autoridades, al llegar al lugar indicado, la patrulla fue emboscada por delincuentes que abrieron fuego de manera indiscriminada.
Los agentes repelieron el ataque, desatándose un enfrentamiento armado que generó pánico entre los residentes del sector. Como resultado de la confrontación, uno de los presuntos atacantes fue abatido por la Policía, mientras que otro fue capturado en el lugar de los hechos. Los cuatro heridos, entre los que se encuentra un policía, fueron trasladados a centros asistenciales para recibir atención médica.
Las autoridades se encuentran investigando si la llamada inicial a la línea 123 fue una trampa para atraer a la patrulla a la zona y perpetrar el ataque. Este hecho se suma a una serie de actos violentos que han puesto en alerta a la ciudad y ha intensificado el debate sobre la seguridad de los uniformados en el ejercicio de sus funciones.
En resumenEste ataque directo y con armamento de largo alcance contra la Policía en una zona residencial de Cali evidencia un grave desafío al orden público y la seguridad ciudadana, obligando a las autoridades a investigar la posible planificación detrás del atentado y a reforzar las medidas de protección para sus unidades.