Tras un periodo pedagógico, las autoridades ya han comenzado a aplicar multas que superan los 600.000 pesos.
Desde principios de agosto, los operativos de control se han intensificado en zonas de alta infracción como el centro de la ciudad, el barrio Tequendama y el norte de Cali.
Hasta la fecha, se han sancionado a siete conductores y se han inmovilizado dos vehículos cuyos propietarios no se presentaron.
El procedimiento consiste en instalar el cepo; el conductor debe contactar a la autoridad de tránsito a través de los datos visibles en el dispositivo para que un agente lo retire y emita el comparendo. Si el conductor no aparece, el vehículo es remolcado a los patios.
La sanción por mal estacionamiento, según la infracción C29, equivale a 15 salarios mínimos legales diarios vigentes, lo que corresponde a 604.000 pesos.
Las autoridades han enfatizado que los operativos serán constantes y buscan fomentar una cultura de respeto por el espacio público para mejorar la movilidad urbana.