La víctima mortal fue identificada como Javier Tello Escobar, de 49 años, quien se desempeñaba como escolta. Testigos describieron la intensidad de la balacera como una “ráfaga de disparos” que sembró el pánico en la zona residencial. Este suceso no solo evidencia la presencia de armamento de guerra en manos de delincuentes, sino que también confirma la disposición de estos grupos para usarlo en áreas urbanas densamente pobladas, incrementando el riesgo para la población civil. Tras el ataque, las autoridades capturaron a dos hombres que se movilizaban en la camioneta, presuntamente vinculados a una estructura criminal.
El concejal Roberto Ortiz comentó sobre la situación general de inseguridad: “La inseguridad golpea a Cali con sicariato y robos de motos que causan muertes sin control. La ola de violencia persiste y el plan de seguridad no logra resultados”. El secretario de Seguridad, Jairo García, confirmó que el CTI de la Fiscalía y la Policía Judicial se encuentran investigando el incidente para identificar a los responsables.