La crisis institucional se originó cuando la Sección Quinta del alto tribunal confirmó en segunda instancia que Beltrán incurrió en doble militancia al apoyar a candidatos al Concejo de partidos distintos a los de su coalición, Bucaramanga Segura. La sentencia dejó sin efectos su elección y obligó al gobernador de Santander, Juvenal Díaz Mateus, a tomar medidas para garantizar la continuidad administrativa. Tras recibir la notificación oficial, el gobernador designó como alcalde encargado a Eduard Jesús Sánchez Ariza, quien se desempeñaba como jefe de la Oficina para la Gestión del Riesgo de Desastres de Santander. La transición no ha estado exenta de tensiones; una de las primeras acciones de Sánchez fue revocar seis nombramientos de jefes de control interno realizados por Beltrán un día antes de la anulación, argumentando que no cumplieron con los requisitos formales de verificación de antecedentes.

Adicionalmente, el secretario del Interior, Gildardo Rayo, presentó su renuncia afirmando que fue solicitada por el nuevo alcalde por instrucción del gobernador.

Mientras tanto, la Registraduría Nacional y la Gobernación coordinan la logística para los nuevos comicios.

El gobernador Díaz Mateus informó sobre una propuesta para unificar las elecciones atípicas de Bucaramanga y Girón, que enfrenta una situación similar, para el domingo 14 de diciembre de 2025. “He estado en permanente contacto con el registrador nacional, él ha propuesto que se realice una sola elección para aprovechar el mismo dispositivo electoral”, explicó el mandatario, quien también advirtió que de no realizarse en esa fecha, podrían posponerse hasta febrero de 2026.